«Cloudificación» total de la red

La brecha entre las telecomunicaciones y las TI se va cerrando a medida que crece la simbiosis y la dependencia mutua entre estos dos mundos. La adopción de modernas tecnologías de virtualización como NFV (basada en VM y en contenedores) y SDN permite a los operadores escapar de la necesidad de mantener dispositivos e infraestructuras físicas, y pasar a redes lógicas y nativas de la nube más flexibles y rentables.

No sólo da la oportunidad de utilizar y pagar sólo los recursos que se necesitan en cada momento, sino que también permite escalar rápidamente los servicios a medida que cambia la demanda. Los CSP pueden integrarse fácilmente entre múltiples proveedores, tecnologías y plataformas, haciendo que el despliegue de los servicios y las actualizaciones sean mucho más rápidos gracias a la nube de telecomunicaciones y a DevOps. El proceso general de introducción de nuevos servicios, desde el diseño hasta el desarrollo, las pruebas y la producción, puede ser considerablemente más corto, más automatizado y menos propenso a errores.

Las soluciones de Comarch ayudan a los operadores en esta transición y proporcionan visibilidad, gestión y orquestación de extremo a extremo de las nubes y redes de telecomunicaciones modernas. Ofrecen un acceso unificado y completo a todas las capas, desde los servicios al cliente hasta la infraestructura, proporcionando herramientas e interfaces potentes para diseñar servicios e implementarlos en diversos entornos (desde servidores heredados hasta nubes privadas, híbridas, múltiples y públicas) utilizando diferentes tecnologías. También permiten avanzar hacia el borde, más cerca de los clientes finales. Las soluciones de Comarch son compatibles con los principales estándares del sector para permitir una fácil integración con los centros de datos, las nubes y los controladores de SDN.